Vacaciones y disfrute del trabajo: el perfecto binomio

Al final acaba llegando... pero se ha hecho un poquito laaaargo. Ahora bien, las vacaciones son necesarias, pero mucho más el poder disfrutar del trabajo. Sí, he dicho DISFRUTAR DEL TRABAJO. En nuestro entorno más o menos cercano, es muy raro y hasta mal visto que alguien pueda enorgullecerse de ir al trabajo, de cómo le reconforta, de lo que le puede dignificar...

Más bien al contrario. Se estila lo de: "vaya marrón", "a ver si me dan la baja", "qué coñazo". Y todo eso, en muchos de los casos, con rostros tristes, apagados, que apenas dicen un "Buenos días" o que miran al suelo o al infinito mientras van en el tranvía o en el autobús.

Amigo o amiga mía. Revélate y agradece, no a dios -a estas alturas todavía tengo más claro que es un gran invento-, sino a tu esfuerzo, al camino emprendido, a tus estudios, a tu fortaleza y, por qué no, a tu suerte... que estés trabajando.

El trabajo dignifica a la persona, le hace ganar en autoestima. Sí, efectivamente, hay que reafirmarlo. Y aunque nos pueda sonar pedante, debemos decírnoslo. Y ojito: nuestros hijos e hijas nos miran, escuchan y copian. Qué queremos transmitirles?. Que el trabajo es lo peor? Que sólo vale pensar en las vacaciones? Queremos construir vagos o vagas?

O quizás sería mejor que piensen en la oportunidad que tienen de hacerse hombres y mujeres de futuro, formándose, queriéndose a sí mismo y a los demás, ayudando, disfrutando de su tiempo de ocio, de sus vacaciones, de su trabajo, realizándose como personas...

En fin, sin querer ser un plasta, así como con otro tipo de lenguajes -sexista o xenófobo- parece que se van dando cambios, también articulemos algo parecido cuando hablemos de TRABAJO.

Así que, con la labor bien cumplida, me permito ahora disfrutar de MIS vacaciones con todas las ganas del mundo. Y sabiendo, eso sí, con mucha suerte y también con el esfuerzo que me costó forjarme académica y profesionalmente, que al final de las vacaciones me esperará nuevamente el trabajo.

Recuerda, amigo, amiga... en septiembre quiero verte con la cabeza alta y decirme un claro y sonoro: "EGUNON" o "BUENOS DÍAS!".

ONGI IZAN TA ON OPORRAK!!!